Conocimiento
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Artículo
La toma de decisiones supone un capítulo fundamental en la relación clínica; representa la cristalización de todo un proceso previo de información y deliberación entre los profesionales del ámbito de la salud y quienes acuden a ellos en busca de una valoración fundamentada. Al final de este proceso se deberá llegar a una decisión considerada la más adecuada entre todas las posibles.
En principio, los pacientes adultos y los denominados “menores maduros”, en virtud del principio de autonomía, han de consentir y decidir por sí mismos.